Caso Fertinal: Cuenta regresiva para Peña Nieto
El escándalo de corrupción relacionado con la empresa chatarra por la que Pemex pagó 635 millones de dólares, Fertinal, ya rebasó las fronteras e implica a cada vez más exdirectivos de Petróleos Mexicanos y empresarios advenedizos… Pero ahora apunta directamente al expresidente Enrique Peña Nieto, quien presuntamente autorizó la transacción mediante un soborno, de acuerdo con una denuncia interpuesta en Estados Unidos.
La trama de la compra-venta a sobreprecio de la empresa Grupo Fertinal a Pemex durante la gestión de Emilio Lozoya Austin –ahora prófugo de la justicia– dio un nuevo brinco la semana pasada con la inclusión del nombre del expresidente Enrique Peña Nieto en una denuncia interpuesta en Estados Unidos, según la cual él “aprobó” la transacción con un soborno de por medio.
De acuerdo con la denuncia, la dádiva que presuntamente recibió el presidente pasó por el fideicomiso F/470 de Banco Azteca, que tenía una cuenta en Banco del Bajío (CLABE 030180900006555442) y una cuenta intermediaria en el Standard Chartered Bank de Nueva York, como muestran documentos consultados por Proceso.
Fue a través de esta cuenta que se repartieron los 203.4 millones de dólares que Pemex desembolsó para la compra de la empresa; la misma cuenta sirvió para esparcir una parte del dividendo de 871 millones 500 mil pesos que el grupo de accionistas –encabezado por el empresario Fabio Massimo Covarrubias Piffer y abogados vinculados con el multimillonario Ricardo Salinas Pliego– se otorgó a sí mismo el 25 de septiembre de 2015, apenas dos meses antes de la firma del contrato.
De ese dividendo, 619 millones 400 mil pesos fueron repartidos “en efectivo” a través del fideicomiso, mientras que los 252 millones 100 mil pesos restantes se distribuyeron “por medio de un aumento en la parte variable del capital social, sin la emisión de acciones representativas de dicho capital”, como reveló Proceso en su edición 2208.
La operación de compra-venta de Fertinal por 635 millones de dólares se diseñó desde la Dirección General de Pemex –entonces a cargo de Lozoya–, y fue bautizada Proyecto Kimora. Incluyó que Pemex pagara los 406 millones de dólares de deudas que Fertinal debía a Banco Azteca y Arrendadora Internacional Azteca, propiedad de Salinas Pliego.
El 21 de enero de 2016, una semana antes de concretarse el traspaso de acciones, los accionistas de Fertinal y Pemex crearon el fideicomiso F/2705 en el Banco Invex, el cual fue utilizado entre septiembre 2016 y enero 2018 para dispersar 38 millones 836 mil dólares que Pemex pagó como “cantidad en depósito” en la firma del contrato.
De ese monto, 27 millones 534 mil dólares terminaron en la cuenta bancaria del Fideicomiso F/470, el cual detenía todas las acciones de Fertinal menos una en prenda.