La compañía acaba de anunciar su primera impresora 3D de metal y se convierte en una de las tecnologías revolucionarias del 2018.

Antecedentes: la impresión en 3D de metal ha tardado en despegar, excepto en aplicaciones de nicho. Pero en los últimos años ha comenzado a superar sus barreras de costos y velocidad (lo que la ha impulsado a convertirse en una de nuestras 10 tecnologías revolucionarias de 2018).

La noticia: la nueva impresora de HP, HP Metal Jet (que le costará unos $ 400,000), se lanzó ayer. Estas máquinas serán utilizadas principalmente por GKN Powder Metallurgy, que fabrica más de 13 millones de piezas por día, además de Volkswagen y el fabricante de metal Parmatech. "El mundo funciona con metales: cada año se producen cientos de miles de millones de piezas de metal", dice Tim Weber, director mundial de metales 3-D de HP.

La tecnología: la máquina utilizará un proceso llamado impresión de aglutinante, que utiliza capas de polvo metálico y un agente aglutinante (que actúa como pegamento) para formar una pieza. Estos productos frágiles se calientan hasta que se funden en el diseño terminado.

La ventaja: la compañía se enfrentará a rivales más antiguos en la impresión de metal tridimensional, incluidos Desktop Metal, GE y Markforged. HP siente que su verdadera ventaja es su capacidad para utilizar muchos de los mismos elementos utilizados en sus otras impresoras de plástico bidimensionales y tridimensionales en sus máquinas de metal.

Cómo cambiará el trabajo: la impresión en 3D de metal tiene el potencial de automatizar aún más el piso de fabricación. Las impresoras requieren menos intervención humana para mantenerlas en funcionamiento que muchos otros equipos. La tecnología también podría permitir que las grandes fábricas que producen en serie un rango limitado de piezas sean reemplazadas por otras más pequeñas que hagan una variedad más amplia, cambiando dónde y cómo trabaja la gente. Tal competencia puede ayudar a bajar los precios e impulsar la innovación.