DEA ofrece 20 millones de dolares por quien delate a Caro Quintero
La agencia antidrogas estadunidense (DEA, por sus siglas en inglés) le puso precio a la cabeza del narcotraficante mexicano Rafael Caro Quintero, al anunciar una recompensa de 20 millones de dólares a quien aporte información que facilite su captura.
De manera paralela, una Corte federal de Nueva York anunció un super-encausamiento contra el prófugo de la justicia mexicana, pues a su juicio continúa siendo uno de los principales operadores del trasiego de drogas a Estados Unidos.
Además, el FBI colocó a Caro Quintero en su lista de los 10 criminales más buscados por la justicia de este país por su papel en el secuestro, tortura y asesinato del agente de la DEA, Enrique ‘Kiki’ Camarena, en 1985.
“Todavía tiene el poder como hace tres décadas”, es la frase de un agente del FBI sobre Rafael Caro Quintero #ElNarcodeNarcos”, luego de haberlo incluido en la lista de los diez fugitivos más buscados.
En un comunicado, el FBI hizo público la incorporación del narcotraficante, a quien se le relaciona ahora con el cártel de Sinaloa, en la lista de los 10 más buscados y por quien ofrece una cantidad de 20 millones de dólares, cifra que no tiene precedente por un narcotraficante.
El agente del FBI, Russ Ellersick, señaló que Caro Quintero fue uno de los principales proveedores de heroína, cocaína y marihuana en los Estados Unidos a fines de los años setenta.
La recompensa por su captura es por su responsabilidad en la muerte del agente de la DEA, Enrique Camarena quien estaba encubierto en una investigación en 1984.
“Al año siguiente, Camarena estuvo cerca de descubrir un ducto de drogas de un millón de dólares de México a Estados Unidos, pero antes de que pudiera exponer la operación, el agente federal fue secuestrado en Guadalajara, Jalisco, México, supuestamente por órdenes directas de Caro Quintero. El cuerpo de Camarena, que mostraba señales de tortura, fue encontrado un mes después”, señala el comunicado.
Agrega que se sabe que Rafael Caro Quintero se esconde en México y el FBI lo considera como una persona “extremadamente peligroso y armado”.
