Habitantes de Sayula llevan mas de 1 año sin alumbrado publico
La Parota y Villas de Alameda las mas afectadas. Sayulenses comienzan a dejar la ciudad ante la miseria.
Las denuncias ciudadanas hechas en este diario y las redes sociales delatan el olvido por parte del Ayuntamiento de Sayula hacia los sectores mas marginados de el municipio. Mientras que el joven e inexperto y manipulable alcalde Daniel Calvario continua despilfarrando millones de pesos en el Tianguis Nuevo, Sayula se sumerge noche tras noche en la obscuridad.
“Llevamos mas de 3 meses sin luz” comenta un ciudadano de la colonia “la Parota”, “Uy eso no es nada, en Villas de Alameda llevamos mas de 1 año” comenta un segundo ciudadano en una expresión mitad sarcástica mitad llena de coraje.
Daniel Calvario ajeno a los reclamos ciudadanos, se niega a atender las solicitudes y se concentra a poner luminarias LED en la larga diagonal del Tianguis Nuevo en donde solo se benefician a los familiares de Samuel Rivas, los Gonzalez y los Fajardo. Los barrios marginados los tiene en el olvido.
Pantallas gigantes para cualquier evento proselitista abundan en los eventos de Daniel Carrión, de hecho, Carrión se ha gastado mas en publicidad en Facebook que en atender la falta de alumbrado publico en todo el municipio.
Mas los barrios marginados no están del todo olvidados, para los familiares y amigos de Carrión, los barrios marginados son un buen lugar para sembrar cantinas ilegales y centros de distribución de alcohol y drogas. Es mas difícil comprar 1 litro de leche que cerveza. Sobre la distribución de drogas nadie quiere hablar por temor a represalias.
Daniel Carrión se ha convertido en el alcalde mas joven y mas corrupto del continente. Negandose tanto el como su equipo a presentar su Declaración Patrimonial, en pocos meses se han sabido hacer de carros del año, casas nuevas y terrenos por doquier. Esto sin que nadie pueda detener el robo sistemático de Daniel Carrión y su equipo de trabajo.
No se vale decir nada, no se permite criticar, quien lo haga es amenazado de muerte por parte de los conocidos troles pagados por Daniel Carrión.