Sistema de agua potable colapsado en Sayula, selfies del alcalde no funcionan mas
Desde hace meses que la mitad de la ciudad carece del vital liquido, las pipas de emergencia que deberían abastecer el agua tardan semanas en llegar, los tinacos están vacíos, la gente comienza a escarbar posos para depositar los excrementos, lavar la ropa la hace uno con amigos, lavar los platos es mas complicado, la población esta desesperada.
Daniel Carrión, el ex-porro estudiantil convertido en alcalde no puede solucionar la problemática, sus continuas sesiones fotográficas para Facebook no alcanzan a llenar los tinacos. Siempre con una excusa ideal, sonriente saludando a la gente que a sus espaldas le critica su hipocresía. Todo esta bien, ya mero, ya mero dice el alcalde. El tiempo pasa, las enfermedades se esparcen. La basura se acumula y la legendaria ciudad de las pitallas se hunde en miseria y olor a fecales.
Esteban Cruz tardo 3 días en cruzar el país, se vino manejando desde California donde trabaja y su meta era llegar a tiempo para la graduación de la primara de su hijo José. Al llegar a Sayula, Esteban tuvo que ir a cagar al cerro, no había agua para el excusado. Temprano por la mañana, el y su familia salieron a Amacueca a bañarse con la tía Lidia para llegar limpios y a tiempo a la ceremonia.
Al igual que la familia de Esteban, sufren 45 mil habitantes del municipio. Los hospitales no tienen agua para lavar, bueno, tampoco tienen medicinas así que no es trágico bromea el alcalde. En los hoteles de prestigio de la ciudad como la Gran Casa o La Casa de los Patios, las sabanas las cambian cada 3er día. En el Meson del Anima 1 vez por semana. La brillantina y el perfume del alcalde, se mezclan con el rancio olor a sudor que le escurre por la frente mientras que continua sonriendo sacándose fotos para las redes sociales. Sayula subió el turismo en un 50% dice el alcalde, pero hay quienes consideran dichas declaraciones un disparate.
La falta de agua afecta también a los habitantes del centro de la ciudad, pero algunos de ellos reciben trato especial, tal es el caso de el regidor Martín Fajardo, del cual se dice que controla a Carrión. Martín Fajardo puede robarse pipas de protección civil para llenar las cisternas de agua de su mansión. Cuando lo denunciaron se reía, cuando le pidieron explicación cobardemente lo negó.
Sayula se hunde en la miseria, la inseguridad, el olor a excrementos, en la basura, el polvo y el olvido.